Ingenio y compañerismo. Los trabajadores de cada sección de la Caja Petrolera de Salud (CPS) - Hospital Elizabeth Seton desplegaron su creatividad para crear sus propias decoraciones navideñas, con los insumos de trabajo que manejan diariamente.
Quién pensaría que instrumentos de uso frecuente en los hospitales podrían convertirse en adornos de un pesebre navideño... para el personal médico de la Caja Petrolera de Salud - Hospital Elizabeth Seton, tomar los objetos que les permiten curar heridas y salvar vidas, para transformarlos en festivos arreglos de Navidad es una tradición que practican hace más de 40 años.
Ariel Quezada, director del Hospital, afirma que este es un proyecto particular que realiza su equipo de profesionales, en una temporada muy ajetreada en la institución, que trabaja por la salud de sus afiliados.
Isis Ampuero Quispe, secretaria de Laboratorio, señala que el trabajo comienza mucho antes de diciembre, cuando todos se reúnen, y tras una lluvia de ideas, se delegan las tareas y responsabilidades.
De esta manera, tienen el tiempo necesario para colectar los materiales necesarios; mismos que, posteriormente, pasarán por un proceso
de reciclaje y embellecimiento.
El deseo de armar el pesebre más original y bonito se funde con el niño interior de cada uno, aquel que recuerda la Navidad como una época de felicidad familiar, esa dicha que ahora buscan transmitir a aquellos atribulados por penas, dolor y preocupaciones: sus pacientes. Sin lugar a dudas, esta es una forma de integrar al personal y además alegrar los pasillos del hospital con amor y fe.
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