A pesar de las dificultades que cursó gran parte de las empresas el año pasado, el sector farmacéutico de Santa Cruz registró un crecimiento aceptable, toda vez que culminó la gestión 2015 con un crecimiento del 6%, llegando a aglutinar a 1.896 unidades en servicio y debidamente certificadas a comparación de las 1.790 farmacias que funcionaban durante el 2014.
Un sector en crecimiento. Delia Corrales, responsable de Farmacia y Medicamentos del Servicio Departamental de Salud (Sedes), informó que durante el 2015 se registraron 106 nuevas boticas, culminando esta gestión con un total de 1.896 unidades a comparación del mismo periodo de la gestión 2014, cuando prestaban servicio a nivel departamental 1.790.
Durante la gestión 2011 existían alrededor de 1.300; el 2012 subieron a 1.474; 2013 llegan a las 1.631; 2014 se registró 1.790 y el 2015 se cerró con 1896 unidades a nivel departamental.
Importaciones reducen sus utilidades. La Asociación Boliviana de Cadenas de Farmacias (Asbocaf) indicó que este sector ha tenido que "ajustarse el cinturón", puesto que afrontó una contracción del 5% en sus utilidades, debido a la importación de medicamentos por la vía ilegal.
La Asbocaf también se refirió a la devaluación de las divisas de países vecinos, en particular puntualizando que este efecto ha conllevado a que los productos que se importan desde el extranjero sean relativamente más baratos, por lo que el precio de venta al consumidor final llega a ser más competitivo, cuestión que favorece a la Economía del ciudadano", Sin embargo, la industria nacional de fármacos en muchas ocasiones no puede competir con algún medicamento sustituto que viene del extranjero, viéndose obligada a bajar sus precios, o en su defecto a perder participación de mercado.
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