Dos bandos de los trabajadores de la Caja Nacional de Salud (CNS) protagonizaron ayer por la mañana una pelea en las afueras del edificio administrativo de la institución, ubicado en la calle Ballivián, donde hay un piquete de huelga.
La medida de los trabajadores intentó ser suspendida por encargados de la administración del servicio de salud público, con el apoyo de algunos de sus dependientes. Al momento de la intervención, los ayunadores reaccionaron de forma violenta y se generó una confrontación que duró poco más de 40 minutos.
Tras el enfrentamiento, que tuvo que ser intervenido por agentes policiales, los huelguistas adelantaron que presentarán sus quejas por el maltrato del que fueron objeto ante la Central Obrera Departamental, exigiendo el respeto a sus condiciones laborales.
El comandante departamental de la Policía, Johnny Requena, hizo declaraciones a la Agencia Boliviana de Información (ABI), en las que señaló que ellos respetan todo tipo de protestas, pero aclaró que no se puede coartar el derecho de la gente de circular con normalidad.
Los trabajadores de la CNS exigen la inclusión de 612 trabajadores del área administrativa a las planillas de la institución, como se acordó tiempo atrás
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