lunes, 14 de julio de 2014

Hospital Viedma tiene recursos pero le falta infraestructura

“Cuando las 15 camillas (del área de Emergencias) están ocupadas se rechaza al paciente”. Con esta aseveración, el director del hospital Viedma, Gastón Osorio, dejó en claro que si niegan atención a un enfermo se debe a las limitaciones de infraestructura del recinto y no a la condición económica de la persona.

Para respaldar aún más esta aseveración, Osorio agregó que el Viedma tiene un fondo económico anual de 4 millones de bolivianos, cerca del 22 por ciento de su presupuesto, para condonar deudas de pacientes en situación de extrema pobreza.

Por tanto, si alguna vez una persona indigente, en situación de calle, inhaladora de clefa, o de otro tipo, es atendida en este recinto, y tras su rehabilitación se enfrenta a una deuda que rebasa sus posibilidades económicas, puede solicitar al personal del Viedma que condone la misma.

Osorio explicó que una trabajadora social es responsable de corroborar el drama que afronta el paciente, a través de una serie de acciones, como la visita del domicilio del enfermo, si es que tiene.

El proceso de condonación demora lo que la visitadora social tarde en reunir las pruebas que demuestren que el paciente no tiene dinero.

Es de esta manera que el Viedma se ocupa de los pobres, según Osorio. No obstante, cuando el espacio del área de Emergencias o las camillas de internación se saturan, no queda más opción que despachar a los enfermos, sean pobres o pudientes, a otros hospitales.

JURAMENTO

En el marco del juramento hipocrático y el mismo Código Penal, existen cláusulas referentes a la obligación que el médico tiene de, mínimamente, rehabilitar a una persona cuando se encuentre en una situación de emergencia. En ese entendido se preguntó al director del Viedma si antes de rechazar y destinar a un enfermo a otro recinto se lo rehabilita. Osorio contestó: “pero si no tenemos campo, si yo no tengo camilla ¿Dónde atiendo al paciente? ¿En el suelo?”.

Lo recomendable en este tipo de casos, según Osorio, es que el enfermo busque otra opción porque, de un tiempo a esta parte, el Viedma se está quedando muy pequeño.

FALENCIAS

Pese a que el Servicio Departamental de Salud (SEDES) anunció la construcción de casi media decena de hospitales de tercer nivel en el departamento, con la intención de paliar el congestionamiento de pacientes en el Viedma, Osorio dijo que ésa no es la solución.

Especificó que solo en el municipio de Cercado hay más de 500 mil habitantes, sin embargo, para atender a esta población el Viedma apenas tiene 198 camas de internación.

En contraposición a esta cifra, Osorio dijo que en Punata hay un poco más de 50 mil pobladores y su recinto hospitalario cuenta con 250 camas. Es decir, en esa provincia hay medio centenar de camillas más que en el Viedma.

“¿No hay coherencia, no?”, se preguntó Osorio, a tiempo volver a cuestionar “¿La gente de Cochabamba va a ir hasta Punata?”, “Ni loca pues”, se respondió.

Por tanto, lo único que le queda al paciente es ir al hospital Viedma, desde tempranas horas de la madrugada para ser atendido. Es más, si quieren una cama de internación no basta con madrugar, según Osorio, sino que tienen que ir a dormir al recinto.

“Sale un paciente y entra otro, ésa es la realidad”, lamentó el médico.

Ante este panorama de evidente congestionamiento en el área de salud, la construcción de los cuatro hospitales de tercer nivel en el departamento representa una solución a largo plazo, debido a que hasta que los mismos se terminen de edificar, “el Viedma va a reventar”, según Osorio.

Esta realidad fue puesta a consideración del presidente del Estado Plurinacional, Evo Morales Ayma, cuando realizó la entrega de un tomógrafo al Viedma, la pasada semana.

¿VULNERACIÓN?

Ante este conjunto de problemas que hay en el hospital Viedma, el rechazo de pacientes siempre ha sido inevitable, al igual que las constantes denuncias de vulneración de derechos presentadas por parte de los enfermos o sus familiares en la Defensoría del Pueblo de Cochabamba.

La acumulación de quejas de pacientes generó que el Viedma se constituya en la entidad de salud más vulneradora de los derechos humanos durante el primer trimestre de 2014, según un informe de la Defensoría del Pueblo.

Al respecto, Osorio dijo que esta determinación proviene de la gestión del exrepresentante del Defensor del Pueblo en Cochabamba Carlos Herbas, y no de la actual autoridad (Marcos Andrés Cuevas). “(Herbas) tiene un problema personal con el doctor Osorio, por lo tanto todo el tiempo recibo acoso de este señor”, manifestó.

Según Osorio, supuestamente el representante de las personas de la tercera edad que dependen del Seguro de Salud para el Adulto Mayor (SSPAM) no recibió el informe de la Defensoría del Pueblo que tacha al Viedma de vulnerador de derechos humanos, siendo su gremio el más interesado.

Por tanto, desde el Viedma se anunció una apelación al informe de la Defensoría del Pueblo departamental, ante Rolando Villena, esto en vista de que Herbas supuestamente no pidió ninguna explicación a Osorio sobre el rechazo de pacientes.

Es más, con la intención de regular las quejas de los pacientes, Osorio dijo que aceptó que la Defensoría habilite una mesa itinerante en las instalaciones del maternológico y en el mismo recinto del Viedma.

SOLUCIONES

Más allá de esta problemática, los más afectados son los pacientes que hoy por hoy aún siguen peregrinando por atención médica y no ven soluciones viables a sus necesidades.

El remedio que se propuso desde las entidades involucradas en este tema es que las autoridades adopten una política que permita desarrollar la infraestructura hospitalaria conforme el ritmo del crecimiento poblacional del departamento.


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