El maternológico Germán Urquidi y el Hospital del Niño Manuel Ascencio Villarroel, ambos hospitales de referencia, se abastecen de agua por carros cisterna ante el racionamiento del suministro de agua del Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (Semapa). Las administradoras de los dos centros médicos, que comparten una sola infraestructura, informaron que diariamente deben comprar 14 viajes de agua de cisternas, cada uno a 180 bolivianos.
María del Carmen Terceros y Jenny Contreras señalaron que tienen problemas por el racionamiento de Semapa, por el mal estado de las cañerías que provoca filtraciones y porque sus depósitos son usados también por la Unidad de Hemodiálisis, la Unidad de Citología y el Pabellón Pediátrico de Quemados.
Explicaron que la única solución es la perforación de un pozo, esta demanda ya fue formalizada ante la Gobernación.
Desde la Secretaría de la Madre Tierra de la Gobernación, confirmaron que se tiene previsto perforar un pozo profundo en el Complejo Hospitalario Viedma. La titular de la Secretaría, Soledad Delgadillo, señaló que el Servicio Departamental de Salud (SEDES) se hará cargo de la tarea utilizando uno de sus equipos.
Aclaró que se trata de una de las actividades planificadas en el marco de la Declaratoria de Emergencia Departamental que contempla la perforación de 32 pozos en 24 municipios.
VIEDMA El administrador del hospital Viedma Jorge Sevillano reconoció que usan el agua del pediátrico y del maternológico para abastecer las unidades de Citología y Hemodiálisis.
Señaló que estos no tienen dificultades de suministro porque cuentan con dos pozos profundos.
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