RECONSTRUCCIóN MAXILOFACIAL  Primera microcirugía exitosa

Transplante mandibular. En Bolivia un equipo de 18 profesionales, entre médicos y enfermeras, llevó a cabo la primera cirugía reconstructiva de rostro en Cochabamba y en el país.

Desfigurada. Así se podía describir el rostro de Susana (nombre ficticio), una joven mujer, que a sus escasos 22 años creía que la vida no volvería a darle motivos para reír.

Su problema se inició hace ya tiempo atrás, donde un pequeño bulto comenzó a crecer en la región maxilofacial degenerando gradualmente hasta convertirse en un tumor benigno.

A causa de la masa, los tejidos colindantes comenzaron a dañarse, es así que su rostro comenzó a perder fisonomía, a tal grado que no podía reconocerse en el espejo.

Con el paso del tiempo su dolencia la llevó a presentar complicaciones y defectos en la región maxilofacial de gran importancia que no podía ser corregida sin una intervención quirúrgica radical.

Estudios realizados demuestran que estas dolencias bucales tienen una alta tasa de mortalidad. En la mayoría de estos casos es necesario hacer una recesión quirúrgica del tumor, pero cuando se realiza la extirpación suele dejar deformaciones faciales posteriores a la cirugía, causando graves problemas de personalidad y de adaptación para el ser humano que lo padece.

Pero en la actualidad estos pacientes tienen la posibilidad de consultar con un cirujano bucomaxilofacial que cuenta con la formación adecuada y la preparación para realizar nuevos procedimientos quirúrgicos.

Es así como Susana se contactó con un especialista y se sometió a una cirugía con la esperanza de volver a mirarse ante un espejo y contemplar nuevamente su rostro.

PROCEDIMIENTO

El pasado sábado, 22 de marzo, se llevó por primera vez en el país una microcirugía de reconstrucción de rostro en hospital San Vicente de Cochabamba. Según declaró el cirujano bucomaxilofacial, Eduardo Milanesi Nunes, este procedimiento es la primera intervención quirúrgica exitosa de este tipo, llevada adelante por profesionales locales.

Un equipo de 18 especialistas, entre médicos y enfermeras, fue el encargado de realizar la primera microcirugía de rostro, siendo un hito de la medicina reconstructiva de Bolivia.

Los profesionales médicos encargados de esta intervención quirúrgica fueron el traumatólogo, Mauricio Asbún, el anestesiólogo Ramiro Castellón y el cirujano bucomaxilofacial Eduardo Milanesi.

La operación, que comenzó a las 06:00 de la mañana en el quirófano del Hospital San Vicente, tuvo una duración de 10 horas ininterrumpidas con una técnica traída de Europa.



RECONSTRUCCIÓN 

La reconstrucción mandibular dentro de la cirugía de cabeza y cuello ha sido un tema muy debatido y estudiado a lo largo de la historia y, especialmente, en los últimos 50 años. La extirpación de lesiones tumorales extensas da lugar, a menudo, importantes defectos óseos y de partes blandas, con sus consiguientes secuelas estéticas y funcionales.

Este procedimiento quirúrgico, desarrollado en Europa, está consagrado hace 30 años y su ventaja es que aporta vascularmente de forma directa al injerto. Evitando de esta manera el rechazo de la pieza.

Según el especialista Eduardo Milanesi hace poco más de 10 años, se colocaba un pedazo de hueso y una placa de reconstrucción, se suturaba y finalizaba la intervención. Solo que en algunos casos, donde el injerto era muy grande y no había irrigación, la pieza se reabsorbía y por ende se perdía el trabajo.

Es así como se desarrolló la técnica de “Colgajo microvascular”, aplicado a defectos mayores a 10 centímetros, donde era necesaria la realización de una microcirugía vascular.

Este tipo de cirugía posibilita la nutrición directa del injerto y permite no solo la reconstrucción del hueso, sino la recuperación del músculo y la piel del paciente. Este método devuelve la sensibilidad, la funcionalidad y además la autoestima del paciente.

EL DÍA DE LA INTERVENCIÓN

Luego de dos meses de preparación, donde la paciente fue sometida a distintos tipos de valoraciones médicas para verificar su estado de salud.

Los médicos que realizaron el trabajo son: Mauricio Asbún, traumatólogo; Ramiro Castellón, anestesiólogo; Eduardo Milanesi, cirujano maxilofacial; Benjo Gareca, cirujano vascular.

La microcirugía demoró 10 horas. En primera instancia se procedió a la extracción de un pedazo de hueso del peroné de unos 15 cm de largo, y parte de la arteria y vena peronea; además de su respectivo músculo y piel de la pierna.

El cirujano vascular, Benjo Gareca, se encargó de conectar las arterias de la estructura de la pierna al cuello.

“La arteria del peroné fue conectada a la arteria facial, la vena peronea a la yugular externa del cuello, eso permitirá un aporte vascular directo del cuello al injerto, disminuyendo la posibilidad de rechazo y fracaso”, explicó Milanesi.

El hueso del peroné sirvió para reconstruir el lado izquierdo de la mandíbula, la piel reconstruirá la parte interna de la boca y el músculo recubrirá la piel perdida de la a paciente. En la cara externa del rostro.

“Se dejó un pequeño monitor de piel dentro de la paciente, para verificar si el injerto está recibiendo el aporte vascular”, dice Milanesi. Al momento del cierre de esta edición la paciente aún se encontraba en el hospital con un pronóstico muy alentador.