En una audiencia de medidas cautelares llevada a cabo ayer en la sala de terapia intensiva del Hospital Obrero de la Caja Nacional de Salud, la jueza del Juzgado 10.º de Instrucción, Ana Gloria Rojas, dictó la detención preventiva del médico Róger Raúl Moreno Buchón en la cárcel de Palmasola, dentro del proceso que el Ministerio Público le sigue por el delito de lesiones gravísimas a raíz de una mala praxis que derivó en la extirpación de un riñón sano del niño Sebastián Justiniano Poquiviquí (3).
La audiencia concitó la expectativa de los medios de prensa, de representantes de instituciones de derechos humanos y promovió la reacción de cerca de un centenar de familiares y amigos del médico procesado, que se apostaron fuera del sector de emergencia del hospital y reclamaron airadamente por el fallo, que consideraron injusto.
La audiencia empezó a las 15:45 y acabó a las 17:45. La comisión de fiscales, encabezada por José Parra, tres abogados defensores de Moreno, el abogado de la familia del niño Sebastián, policías de la Felcc, la jueza Gloria Rojas y su personal auxiliar se calzaron batones hospitalarios en tono rosado para interactuar con el procesado, que yacía en la cama 15 de cuidados intensivos.
Todo se realizó a puerta cerrada, pero trascendió que la defensa desvirtuó algunos riesgos procesales al presentar documentos en favor de Moreno, que acreditaban su trabajo, la existencia de una familia y domicilio en Santa Cruz, además que los abogados presentaron el pasaporte del médico en señal de que no tenía intenciones de salir del país.
Empero, los fiscales argumentaron que el galeno, estando en libertad, podía influir negativamente en las otras seis personas de su equipo que están siendo investigadas y en la familia del niño Sebastián.
Esa justificación y antecedentes sobre otro proceso que sigue pendiente contra Róger Moreno, aparentemente, inclinaron la balanza para que la jueza decidiera ordenar la detención preventiva.
Recurso de apelación
Los fiscales del caso salieron furtivamente del hospital. Los que informaron sobre el resultado de la audiencia fueron el abogado Felipe Hurtado, que patrocina a la familia del niño Sebastián, y Joadel Bravo, uno de los asesores del médico Moreno, quien indicó que en audiencia se apeló el fallo de la jueza, el mismo que será resuelto próximamente por un tribunal de alzada.
“El delito de lesiones gravísimas se aplica para la persona que tiene la voluntad de lesionar a alguien, cosa que no hizo el Dr. Moreno. Los médicos incurren en lesiones culposas”, dijo Bravo.
“Parte de la población y mucha prensa ha matado civilmente al Dr. Moreno sin ver lo que hizo en el Oncológico en 14 años de trabajo sin cobrar un peso”, renegó su amigo, Armando Barbery.
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