Sin importar cómo se sienta la persona debe madrugar para hacer fila. En los hodpitales del complejo hospitalario Francisco Viedma, la gente duerme o llega a partir de las 2:00. En el hospital clínico, el único de tercer nivel en el departamento, se extienden cada día 400 fichas para el área de consulta. Pero, aún así la demanda de atención médica supera enormemente la capacidad del servicio. En los centros de primer nivel, se dan hasta 100 fichas.
La historia de las filas es permanente. “Anoche dormí aquí (en el hospital materno Germán Urquidi). Estoy desde las diez de la noche. La otra vez vine a las cuatro de la madrugada y ya no alcancé a tener la ficha. Por eso esta vez tomé mis previsiones”, contó una paciente, Dani Almeida, que madrugó para ser atendida en el maternológico el martes.
El secretario ejecutivo del Sindicato de Ramas Médicas de Salud Pública (Sirmes), Carlos Nava, explicó que el sistema de salud está organizado en tres niveles: los centros de salud están en el primero y los hospitales como el Cochabamba en el segundo. En tanto que el Viedma corresponde al tercero, porque tiene capacidad para resolver dolencias complejas. “Muchas veces el fracaso en la atención es atribuible a la falta de presupuesto, infraestructura, equipamiento y recursos humanos”, reflexionó.
El funcionamiento de los servicios de primer y segundo nivel es responsabilidad de la Alcaldía. Sin embargo, realizan su trabajo en medio de varias limitaciones. En el centro de salud Cerro Verde los pacientes críticos incluso son trasladados hasta el Viedma en taxis, porque no hay ambulancias. A ello se suma que la mayoría de las veces, los médicos deben cubrir con sus recursos el costo del transporte.
En los centros y hospitales los medicamentos se entregan a medias. Laura Rocha, una paciente, dijo: “Vengo a consulta de ginecología y pago 20 bolivianos, que parece no ser mucho. Me dan la receta y cuando voy a recoger los medicamentos sólo tienen uno o dos de todo lo que me recetan. Entonces, voy a la farmacia y resulta que algunas pastillas cuestan 50 hasta 80 bolivianos: que no puedo pagarlas”.
La exdiputada, Natividad Choque, expresó: “Una vez fui al centro de salud Cochabamba, donde hay especialistas en diferentes áreas y demás. Pero, por ejemplo, los anestesiólogos no podían atender porque el municipio no había comprado la anestesia, ni las jeringas. Entonces, los pacientes estaban yéndose al hospital Viedma”.
Por otro lado, en lo que corresponde a recursos humanos, los nosocomios de primer nivel tienen de dos a 10 médicos que atienden hasta 100 pacientes por día. Otros no tienen el personal para realizar las visitas a las casas y cumplir con las premisas de la medicina comunitaria. Ante esta situación algunos directores, además de administrar el centro tienen que salir a atender a los pacientes a domicilio.
LA OPINIÓN DE LOS PACIENTES
ALFREDO ANTEZANA, PACIENTE
Estoy desde las cinco de la mañana para ser atendido en reumatología. Vengo varias veces y siempre debo madrugar. Me atienden muy bien, pero lamento mucho que sea el único centro, pues está prácticamente colapsado.
Estoy viniendo con el programa del adulto mayor que tiene muchos problemas, porque la Alcaldía no está pagando lo que debe. Dejé de venir dos años precisamente por estos conflictos. Espero que ahora que pasaron las elecciones se atiendan los problemas en salud.
ARMINDA SALCIRA, PACIENTE
Estoy desde las cuatro de la madrugada por agarrar ficha, pero nos tienen con la puerta cerrada y ya son casi las siete. Las enfermeras son malas, no te atienden bien y te riñen, pero los doctores sí son buenos, aunque recién empiezan a atender a las nueve.
Si no alcanzamos a tener ficha tenemos que volver al día siguiente a madrugar de nuevo. Yo vengo desde la avenida 6 de Agosto, pero otras vienen desde La Chimba u otros lugares más alejados todavía.
CENTROS DE SALUD SIN CONDICIONES
Debido a refacciones no trabajan adecuadamente
Mientras la Alcaldía trabaja en la refacción, reconstrucción y ampliación de los hospitales, éstos trabajan en sitios alquilados en medio de incomodidades. Por ejemplo, el centro de salud de Cerro Verde funciona temporalmente en una infraestructura prestada ubicada en el mercado de la zona. La única forma de acceder al lugar es a través de escaleras. Por lo tanto, una persona de la tercera edad o con discapacidad llega con dificultades. Además, la gente debe esquivar los puestos de venta.
En tanto que el hospital Cochabamba está dividido: una parte funciona en una casa en la avenida Oquendo con la atención de consultas y otra en la calle Nataniel Aguirre donde funciona la sala de emergencias.
La ampliación del centro de salud Alalay está paralizada y le falta equipamiento, ventanas y puertas para que empiece a funcionar. La constructora paralizó las obras, porque la Alcaldía no continúo con el proyecto. En la parte que resta por ejecutar funcionará el quirófano para partos y cinco salas de internación.
INFRAESTRUCTURA
No se cumplen las normas de la OMS en centros
La cantidad de centros de salud existentes en Cochabamba es insuficiente frente al crecimiento de la población. En el primer nivel debería existir un centro por cada 5.000 habitantes. En el segundo uno por cada 50.000 y en el tercero uno por cada 200.000 pobladores, según la norma internacional de la Organización Mundial de Salud (OMS).
Sin embargo, en el Distrito 8 que abarca los barrios cercanos a la avenida Petrolera no hay ninguno. El centro de salud de Cerro Verde atiende a más de 28.000 habitantes. A ello se suma que deben trabajar en el primer piso de un mercado, pues sus instalaciones están en construcción.
A ello se suma que muchos no tienen resguardo suficiente. La mayoría tiene porteros que se ocupan de la limpieza y además de cuidar las instalaciones.
El caso más crítico es el del hospital del niño que no cuenta con un ambiente propio y comparte la infraestructura con el maternológico, debido a que la obra que se construyó para este servicio tiene problemas estructurales y debe ser demolida por completo. Se estima que el daño económico es de 6 millones de bolivianos.
Niveles de atención en salud en Cochabamba
En todo el departamento existen 185 centros de primer nivel, entre privados y públicos, sólo en Cercado hay 48. En un recorrido realizado por algunos hospitales se constató algunas diferencias en infraestructura y capacidad de atención. En este nivel se prioriza la prevención de la salud.
Los directores y pacientes explicaron que la mayoría de los nosocomios cuenta con pocos médicos en relación a la cantidad de personas que atiende. Sin embargo, la población señaló que los programas que se trabajan son positivos. Entre ellos están la tuberculosis, insuficiencia renal, vacunas, rabia, mal de Chagas y VIH.
Una de las diferencias con el segundo nivel es que estos hospitales deben contar con un equipo que recorra los barrios para buscar pacientes activos. En el caso del centro Alalay existe personal para esta labor. Sin embargo, en Cerro Verde, los cuatro médicos que realizan la atención, también hacen trabajo en la comunidad.
El director del centro de salud Alalay, Américo Arias, expresó que también es un problema el hecho que muchas personas van directamente al hospital Viedma.
A pesar de que en el departamento existen 22 centros de salud de segundo nivel, en Cercado sólo hay uno que es público: el Cochabamba. El mismo atiende temporalmente en un ambiente alquilado, en la avenida Oquendo entre Uruguay y Aroma, por la construcción de su nuevo edificio. Sin embargo, la unidad de Emergencias aún se encuentra en la calle Nataniel Aguirre entre Aroma y Montes, cerca de donde se edifica la nueva infraestructura.
Muchos de los pacientes son personas de la tercera edad y embarazadas que llegan de zonas alejadas de la ciudad y de otros municipios como Tiraque o Colomi. Pero, al igual que la gente de la ciudad deben madrugar por una ficha.
Por ejemplo, Fausto madrugó el miércoles a las 2:00. Llegó desde K’ara K’ara para conseguir una ficha con el traumatólogo para su mamá de 80 años. Pese a la espera dijo: “Los doctores nos tratan bien, aunque las enfermeras a veces son medio malas”. Este centro está a la espera de que se termine de construir la infraestructura para trasladarse, pues por el momento el lugar donde se encuentran no es muy grande y los pacientes no se sienten cómodos.
El Complejo Hospitalario Viedma es el único de tercer nivel en Cochabamba. Sólo el hospital clínico atiende al día más de 400 pacientes en consulta externa en 22 consultorios donde se organizan 60 médicos especialistas.
Hay pacientes que llegan desde Arani, Vacas, Tolata e incluso Villa Tunari. Silverio Flores de Punata dijo que es el mejor hospital al que su economía le permite acceder. “En mi pueblo, el doctor me dijo que tengo diabetes y sólo me puedo hacer curar en Cochabamba, entonces me vine. Pero, como yo no tengo plata para pagar un privado, me dijeron que vaya al Viedma, porque es bueno. Tengo que esperar mucho, hay que mejorar en eso”, comentó.
El complejo abarca el hospital materno infantil y del niño. Ambos reciben pacientes de todo el departamento. Sin embargo, hay algunas unidades que están en situación crítica.
En el hospital del niño, la Unidad de Quemados está saturada y la infraestructura es demasiado antigua. Las familias de los pacientes señalan que el médico es uno de los mejores en esta área.
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