Este servicio está situado en la avenida Siglo XX, en el sur de la ciudad de Cochabamba. El director de este centro, Américo Arias, informó que cada mes nacen entre 50 y 60 bebés en ese hospital. Hace un par de días tenían más de 80 pacientes para atender con fichas, en consulta externa. Hay días en los que atienden una centena de personas o más. Es un servicio integral, es decir de 24 horas.
Los galenos recordaron que la construcción inició en 2008, durante la gestión municipal de Edwin Castellanos y se paralizó en 2010. Durante la actual gestión, de José María Leyes, los recursos requeridos ya fueron presupuestados, en 2016, para concluir la construcción. Sin embargo aquello aún no ocurrió.
En la actualidad el servicio funciona en la antigua construcción que tiene como 20 años. Hace tiempo, por la falta de espacio y el hacinamiento en otros hospitales un bebé nació en el suelo.
Al lado de los ambientes antiguos está la construcción abandonada apartada por una lona.
La obra gruesa se deteriora sin uso. Una puerta improvisada de calamina está casi caída. En el ingreso a las gradas hay una camilla para ginecología que no fue arreglada adecuadamente. El piso tiene tierra y basura, las conexiones eléctricas aparecen por debajo de los techos. En la segunda plata hay excremento de perros.
El concejal del Movimiento Al Socialismo (MAS) Sergio Rodríguez manifestó que en 2016 los recursos para terminar la construcción ya se incluyeron en el Plan Operativo Anual (POA) Municipal, pero la ejecución “fue cero”.
“No entiendo porqué las anteriores autoridades y las actuales no hacen ese esfuerzo para poder concluir. Incluso, el 2010, ya se había comprado camas”.
Los armazones nuevos de las camas, pintados de gris, están acomodados unos sobre otros y se mantienen en un depósito.
El secretario de Salud de la Alcaldía cochabambina, Enrique Torrico, manifestó la posibilidad de reactivar las obras este año, en agosto. Hay un millón de bolivianos presupuestados en el POA municipal.
Explicó que existe una auditoría debido a que no existía derecho propietario en el terreno donde se emplazaba la edificación.
“Se ha ido solucionado el tema en esta gestión”.
Para viabilizar la solución, autoridades municipales, el Director y dirigentes de los barrios aledaños se reunieron para coordinar la reestructuración del bloque y enviaron planos al Servicio Departamental de Salud (SEDES), institución a la que le corresponde la autorización conforme a normas internacionales.
“Nos entregaron la carta, más o menos en diciembre (de 2016), diciéndonos que el proyecto estaba bien y que se puede empezar a ejecutar la obra”.
La autoridad dijo que los recursos ya están garantizados. Al tratarse de más de un millón de bolivianos, la propuesta fue enviada a la Dirección de Proyectos del Gobierno Autónomo Municipal.
Se aguarda la formalización del reformulado presupuestario, dentro de un par de semanas, y se prevé que hasta dentro de un mes se lance la licitación para que una constructora se haga cargo de la refuncionalización.
CONDICIONES En la parte posterior de la infraestructura actual hay una lavandería donde las sábanas y demás ropa del hospital se lavan a mano.
El administrador informó que cuentan con una lavadora industrial, además de una secadora, desde principios de año, pero que no funcionan debido a que falta realizar la instalación trifásica.
Estos equipos nuevos ocupan un ambiente situado al lado del bloque en construcción. Por sus dimensiones, fue necesaria la apertura de una pared para su ubicación.
El Secretario de Salud de la Alcaldía explicó que hay centros en los que se presenta este problema, porque son antiguos y no tienen este tipo de instalación eléctrica.
Anunció que este tema será solucionado en estas semanas con el uso de un generador. Similar problema existiría en el centro de salud Valle Hermoso.
PERSONAL El administrador del centro, Álex Luizaga, informó que hay 44 funcionarios, entre médicos, enfermeras, bioquímicos, un radiólogo, odontólogos y administrativos. De ellos, 11 dependen de la Alcaldía y 33 fueron contratados a través del SEDES.
Hay 10 camas para la internación de pacientes. Considerando el anuncio de conclusión de las obras, habrá 23 espacios más. A decir del Administrador, será necesario triplicar el personal para garantizar un funcionamiento óptimo.
Lamentó que, en la actualidad, solo cuenten, como ejemplo, con una licenciada en enfermería. En la tarde y noche ya no existe este personal.
El concejal Rodríguez cuestionó que no haya inversiones municipales en el área de salud.
Aseguró que con 50 millones de bolivianos, de los alrededor de 1.700 millones que tiene la Alcaldía este 2017, es suficiente para activar todos los centros de primer y segundo nivel en el municipio.
Torrico informó que el presupuesto inicial para salud en esta gestión asciende a 140 millones de bolivianos y resta la formalización de 30 millones adicionales, que se consideraron para el primer reformado.
Sin embargo, aclaró que estos montos incluyen una serie de actividades, entre ellas la entrega de suplementos, equipamiento, compra de medicamentos, insumos y reactivos, renovación de instrumental y otros.
Propiedad
Se realizó una auditoría tras detectar problemas en el derecho propietario que. Según las autoridades municipales de Cochabamba, se logró solucionar y este año se prevé retomar las obras.
Apuntes
La licitación
Cuando una licitación incluye más d e 1 millón de bolivianos, el proceso dura unos 45 días.
Se publica en el Sistema de Contrataciones Estatales (Sicoes) y las empresas presentan sus propuestas en un plazo de 10 días, luego la comisión a cargo tiene un tiempo para la revisión. Después se da la adjudicación, siempre y cuando no se declare desierta, y de ahí restan 15 días más para que la empresa entregue la documentación necesaria y se pueda realizar el contrato.
La ambulancia
No todos los centros de salud de primer nivel cuentan con ambulancias. El centro Alalay tiene una y el vehículo también es utilizado a requerimiento de otros servicios como Villa Venezuela, Cerro Verde y Alto Cochabamba.
Requerimientos
Solo para medicamentos,
la Secretaría de Salud de la Alcaldía prevé el uso de entre 15 y 18 millones de bolivianos, este 2017, para medicamentos, insumos y reactivos. Solo para el suplemento Carmelo, para
adultos mayores de 60 años, se presupuestó 4 millones.
El secretario de Salud aseguró que se cuenta con el “dinero suficiente para lo que es completamente necesario”.
El IDH
Las autoridades municipales dijeron que el recorte del IDH repercute en la posibilidad de contrato de personal y otros.
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