Beneficiarios peregrinan por servicios del SUMI

El Seguro Universal Materno Infantil (SUMI) ha aumentado sus prestaciones de servicio, según han afirmado las autoridades nacionales y departamentales del área de la salud, que aseguran un servicio íntegro en favor de la población. Sin embargo, la realidad de los beneficiarios es otra, por lo menos en los hospitales públicos de la capital cruceña, donde beneficiarios y personal médico deben lidiar con dificultades y deficiencias relacionadas a la falta de infraestructura, recursos humanos y la burocracia en los procesos administrativos para la provisión de equipamiento y medicamentos. La carencia de médicos especialistas es otra de las debilidades que tiene el sistema para brindar un servicio acorde a las necesidades de la población infantil principalmente. Las carencias le ganan a la gratuidad de los servicios. En el caso del hospital Japonés, desde hace más de un año, los pacientes que precisan realizarse tomografías deben esperar hasta 20 días para que le realicen este estudio neurológico debido a que el tomógrafo del nosocomio está deteriorado y las autoridades no han hecho la reposición del mismo. "Es un calvario porque del Hospital de Niños vienen a este centro porque allá no hay el especialista en neurología infantil y acá me dicen que no hay tomógrafo. Llevo veinte días esperando para que a mi niño le hagan una tomografía" señaló angustiada Mariela Rojas en el hospital Japonés, pues su pequeño precisaba los estudios de manera urgente para la colocación de una válvula que requería para sobrellevar la hidrocefalia que padece. La mujer también protestó por las carencias que presentaba el hospital para cumplir las prestaciones del seguro materno infantil, pues pese a que su niño era menor de cinco años tuvo que correr con los gastos de la receta y, además, pagar las fisioterapias que precisa. Por su parte, Ramona Chávez, que también tenía a su pequeño internado por una caída, emitió similar protesta. "Con la fisioterapia tuve que sacar de donde no tenía porque el SUMI solo contempla cinco sesiones, pero resulta que los medicamentos que son supuestamente gratuitos igual que los laboratorios y estudios también debo correr porque no puedo esperar a que solucionen sus problemas de aquí a un mes" apuntó. Peregrinan hasta en tres hospitales por un servicio. Por otro lado, en el hospital Mario Ortiz los beneficiarios también deben peregrinar a otros hospitales para acceder a estudios básicos de nefrología, neurología y cardiología, ya que no cuentan con profesionales formados en estas especialidades. Si bien la responsable del SUMI de este centro, Milka Cáceres, admite debilidades a la hora de realizar los procedimientos administrativos para la compra de medicamentos, asegura que no son tan graves como la carencia de especialistas en áreas básicas como las de neurología, cardiología y nefrología infantil, que son necesarias para la atención de patologías cerebrales, ecocardiogramas al corazón y problemas renales, que están entre las demandas más comunes de este centro de referencia en atención infantil. "Hay grandes falencias que nos dificultan una óptima atención a los beneficiarios que están ligadas a las especialidades médicas infantiles. Contamos con una sala de neurocirugía pero como hospital pediátrico no tenemos un neurólogo clínico infantil", resaltó. Ante la situación los pacientes deben realizar interconsultas en el hospital Japonés y realizarse las tomografías en el hospital San Juan de Dios, pese a estar internados en el Hospital de Niños. En el caso de los pacientes con problemas renales, afirma que a diario deben ser derivados a la Caja Petrolera de Salud, ya que ni este como los demás centros que hacen las prestaciones de los servicios del SUMI cuentan con especialistas en nefrología infantil. Asimismo, narró el drama de los padres y niños que presentan problemas del corazón, que también deben aguardar espacios para interconsultas en el hospital Japonés para ser asistidos por el cardiólogo infantil. No obstante, cuando precisan ecocardiogramas y exámenes complejos, estos deben esperar hasta tres meses para que en la Caja hagan un espacio y poder acceder los estudios, tomando en cuenta que su prioridad es la atención a sus afiliados "Es lamentable porque cuando hay emergencias deben buscarse los medios para conseguirse en centros privados o sustituir por otro estudio similar", aseveró. Justamente todo este drama le tocó vivir a una madre de familia que se presentó como Karina Mamani. "De no ser por la hermana Francisca y el padre Mateo, que son unos ángeles, mi hijo quién sabe qué suerte hubiera corrido. Yo no tenía siquiera para costear mis pasajes de hospital en hospital en busca del especialista, cuando lo encontré no podía hacerle hacer el estudio porque era en otro lado y no había espacio", señaló llorosa la mujer, a tiempo de destacar la acción social que realizaron los voluntarios al costear el ecocardiograma que precisaba su pequeño de tres años, a quien le detectaron una afección cardíaca. "Gracias a Dios tanto este como otros hospitales cuentan con ángeles que se encargan de paliar las dificultades que enfrentan los padres, no solo en este caso y en esta área, sino en muchos servicios y prestaciones que no están incluidas en el Seguro Materno Infantil", señaló Orlando Jordán, jefe de Pediatría del hospital Japonés, que es referente en tratar patologías cerebrales. Limitaciones no deben afectar la atención. Consultado al respecto, el director del Servicio Departamental de Salud (Sedes), Joaquín Monasterio, admitió las deficiencias que presenta el sistema de salud pública en lo que respecta infraestructura y personal de recursos humanos, aunque aseguró que esto no afecta ni debe repercutir en la generación de servicios del SUMI, toda vez que por ley todo centro de salud público o privado debe contribuir a la atención de los beneficiarios en caso de que el sistema público no tenga la capacidad de hacerlo. "En Santa Cruz tenemos problemas porque no existe la capacidad instalada en servicios de muchos riesgos como terapia intensiva neonatología. No tenemos la capacidad de sostener la demanda que cada vez crece más por el incremento de la población y nos obliga a tomar medidas extraordinarias como la posibilidad de que niños y mujeres embarazadas puedan ser atendidos en el sector privado", dijo antes de resaltar las bondades y la diversidad de servicios y prestaciones que brinda el seguro. Respecto a la necesidad de especialistas, la autoridad justificó que esta debilidad pasa por un problema estructural del país a nivel general, tomando en cuenta que en Bolivia no hay condiciones para ofertar o formar especialidades como las antes mencionadas. Responsable del SUMI afirman que las debilidades deben ser asistidas. Por su parte, el director Nacional del SUMI, Dante Ergueta, manifestó que desde 2003, cuando se determinó este beneficio social mediante la Ley 2426, se han logrado grandes avances para optimizar el servicio, entre ellas la ampliación de las prestaciones de servicio que en un inicio eran 500 y que hoy superan las 700 en beneficio de mujeres embarazadas y menores de 5 años a través de la atención ambulatoria integral, hospitalización, dotación de insumos médicos esenciales, servicios de diagnóstico, tratamiento médico y quirúrgico, así como transporte de referencia y contrarreferencia para emergencias ginecológicas y pediátricas. Sin embargo, admitió debilidades que enfrentan para poder ampliar la cobertura a las provincias y áreas rurales, donde cree que se da la mayor dificultad para que los beneficiarios puedan acceder a este beneficio social. Para el funcionario, las dificultades mencionadas anteriormente tienen que ver con fallas estructurales que deben ser atendidas por las autoridades de salud municipales y departamentales, tales como la falta de equipamiento y recursos humanos. Asimismo, aseveró que "es necesario reorganizar el sistema público a fin de que se cumpla con los protocolos de atención desde el primer hacia el tercer nivel de salud pública", toda vez que los problemas de asistencia están ligados a la incorrecta acción de los beneficiarios que acuden directamente a los hospitales de tercer nivel en todos los casos, sean estos complejos o no. En ese sentido, instó a la ciudadanía a informarse acerca de sus derechos y beneficios, toda vez que los servicios del SUMI son completamente gratuitos siempre y cuando estén contemplados en el manual de prestaciones. Respecto a la necesidad de ampliar los servicios y contemplar prestaciones excluidas actualmente como el tratamiento de enfermedades crónicas, colocación de prótesis y otros elementos de rehabilitación como equipos oftalmológicos o lentes, entre otros, no pueden ser contemplados porque su aplicación podría poner en riesgo la sostenibilidad del seguro pensado únicamente en la madre y el recién nacido a fin de reducir la tasa de mortalidad materno infantil del país. En ese sentido, destacó las prestaciones de servicio de salud a 3.874.630 menores de 5 años y las 690.542 prestaciones de servicio a más de 331.632 mujeres embarazadas en 2012. Por otro lado, en lo que va del año se ha llegado a 1.330.187 niños menores de 5 años con 1.847.288 prestaciones y a 331.632 mujeres embarazadas con 266.523 prestaciones de servicio. "Hay falencias que nos dificultan una óptima atención a los beneficiarios por falta de especialidades médicas infantiles. Contamos con una sala de neurocirugía, no tenemos un neurólogo clínico infantil'. Milka Cáceres Responsable del SUMI en el Hospital Infantil Servicios El Sistema Único de Salud, la solución está pendiente Sobre las dificultades que enfrenta el sistema de salud público para el cumplimiento y cobertura del Seguro Universal Materno Infantil (SUMI), el director del Servicio Departamental de Salud mencionó la necesidad de poner en práctica el Sistema Único de Salud, que es una tarea pendiente del actual Gobierno nacional. "Si bien esta iniciativa está agendada en las políticas del Gobierno nacional, hasta la fecha esto no ha mostrado avances para beneficio de la población", destacó Joaquín Monasterio, quien afirma que hasta la fecha se ha convocado a las autoridades nacionales y departamentales de salud para la realización de la Cumbre Nacional de Salud. Para la autoridad de salud departamental "no existe una voluntad política de parte de las autoridades nacionales para poner en práctica el Seguro Único de Salud, que es una de las soluciones a la situación actual". Remarcó además que el Gobierno y el Estado cuentan con las condiciones económicas para concretar esta promesa tan fundamental para el bienestar de la población. Al respecto, el responsable Nacional del SUMI, Dante Ergueta, manifestó que se está trabajando en la creación de un Sistema Único de Salud, aunque justificó el retraso en los avances del mismo debido a la realización del Censo Nacional de Población y Vivienda 2012, ya que esto revertirá el proceso de participación de los nueve departamentos con sus provincias.