Las filas de personas con baldes y galones en las manos para intentar abastecerse de agua se incrementaron en los últimos tres días en Sucre por los sectores donde existen vertientes, como en la zona alta del Guereo, al pie de los cerros Sica Sica y Churuquella, y el estanque de la zona del parque Bolívar.
La falta de agua se siente con fuerza en los hospitales. Algunos funcionarios de los centros de salud salieron a lavar la ropa de los enfermos en los ríos cercanos a Sucre porque, pese a contar con tanques de almacenamiento, no soportaron varios días de racionamiento.
El desabastecimiento comenzó a sentirse el miércoles, cuando un derrumbe en el canal de Ravelo dejó a toda la ciudad de Sucre sin agua potable. Ayer, después de seis días, volvió la normalidad en el centro de la capital, pero en las zonas altas, que son la mayoría, no llega ni una gota. Los ejecutivos de la Empresa Local de Agua Potable y Alcantarillado Sucre (Elapas), tras varios días de silencio, ayer comunicaron que la dotación se normalizará de forma paulatina y difundió un programa de servicio a través de cisternas.
El derrumbe en el canal de Ravelo fue el miércoles, pero la madrugada del sábado hubo otro deslizamiento en el mismo sector del acueducto en Socapampa, que colapsó el servicio de agua y exasperó la protesta de la ciudadanía que no tenía ninguna explicación de lo que estaba pasando porque los funcionarios de Elapas apagaron sus teléfonos celulares.
Sin reacción
El domingo, cuatro días después del corte, directivos de Elapas se reunieron con el alcalde de Sucre y otras instituciones para conformar el Comité de Operación de Emergencia Municipal (COEM) para asumir acciones respecto a la crisis del agua.
Este comité impulsó la declaratoria de alerta roja y el Concejo Municipal autorizó la contratación de bienes, servicios y garantizó los recursos económicos para la reparación de los daños ocasionados y el alquiler de cisternas para llevar agua a las zonas altas, a los hospitales y a las unidades educativas.
El vicepresidente Álvaro García Linera convocó a la Alcaldía a trabajar las 24 horas para restituir el servicio a toda la ciudad y apuntó que falta organización para resolver el problema
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